Delegado de Protección de Datos (DPD o DPO)

• Notificación a la APD: Nos encargamos de comunicar nuestra designación como tu DPD a la autoridad de control dentro del plazo legal.
• Asesoramiento y supervisión: Informamos a tu equipo sobre normativas, supervisamos el cumplimiento y fomentamos la formación en protección de datos.
• Interlocución con la AEPD y los interesados: Gestionamos consultas, inspecciones y reclamaciones, garantizando una comunicación fluida con la autoridad y los afectados.
• Evaluaciones de Impacto (EIPD o DPIA): Asesoramos y supervisamos su correcta aplicación cuando sea necesario.

Un DPD certificado garantiza el cumplimiento del RGPD y la LOPD, minimizando riesgos de sanciones de hasta el 4% de la facturación anual o 20 millones de euros. Además:
– Aporta experiencia y conocimientos actualizados en protección de datos.
– Mejora la confianza de clientes y socios comerciales.
– Optimiza procesos internos, reduciendo costes y riesgos.

• Conocimiento profundo del RGPD y la LOPD.
• Experiencia práctica en protección de datos y seguridad.
• Habilidad para comunicar requisitos legales y gestionar riesgos de privacidad.

Un DPD interno es un empleado de la empresa, mientras que un DPD externo aporta mayor independencia, ahorro de recursos y especialización en protección de datos.

• El RGPD obliga a nombrar a un DPD en casos como: autoridades y organismos públicos.
• Empresas que traten datos personales a gran escala.
• Empresas que manejen datos sensibles (salud, condenas penales, etc).
• Instituciones educativas y entidades del sector financiero, telecomunicaciones y energético.

Si tienes dudas sobre si tu empresa necesita un DPD, consúltanos sin compromiso.